Los plátanos son probablemente una de esas frutas que le gustan a todo el mundo, incluso a quienes no les atrae del todo eso de comer vegetales. Tienen múltiples aplicaciones en la cocina y se pueden comer tanto en caliente como en frío.
Propiedades nutritivas
El plátano tiene un alto contenido en magnesio y potasio, así como hierro y proteínas, entre otros nutrientes. También contiene altos niveles de azúcares y carbohidratos, lo que hace que tenga más calorías que otras frutas y conviene consumirlos con moderación.
En la cocina
Se pueden utilizar los plátanos para hacer batidos, cremas y pasteles, ensaladas de frutas y foundes. Aunque sus aplicaciones en postres y recetas dulces son las más habituales, también se pueden encontrar en preparaciones saladas, especialmente los conocidos como plátanos macho, que se hacen fritos y rebozados. También son un excelente acompañamiento para platos de arroz cocido, como el conocido arroz a la cubana.
Consejos de conservación
Los plátanos maduran muy deprisa, por lo que conviene consumirlos en poco tiempo. Lo que no se aconseja es guardarlos en la nevera, ya que el frío perjudica muy seriamente la fruta, y el sabor de estos se pierde cuando se come así. Si se quiere frenar un poco el proceso de maduración, pueden envolverse en papel de periódico, pero conviene no dejar pasar más de una semana para terminar con ellos.
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